viernes, 26 de marzo de 2010

Hasta Dios es mortal.



Ayer escuché en la radio contar a un tal Gabriel su afición por
subrayar en los libros todas las palabras que no entiende.
No tendría el asunto mayor trascendencia, si no fuera porque
el bueno de Gabriel se apellida García-Marquez. Y es premio nobel.
Está bien seguir recordándose a uno mismo que todavía no hemos aprendido nada.
De lo contrario me mataría la desgana, o me pegaría un tiro.


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2 comentarios:

  1. :D Es genial esta entrada
    Yo si no fuera por García-Márquez, por ejemplo sería de los que escojerían tiro en la cabeza xD

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  2. García Márquez es una inspiración en todo sentido. Su forma de escribir me confirma que la magia está en la sencillez. =)

    http://larosanosemarchita.blogspot.com/

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